Los israelíes respondieron de esta forma tras acusar a Hamás de lanzar decenas de proyectiles desde estas zonas en contra de Israel en el que murieron tres personas.
Crece la tensión en medio de las fiestas religiosas de Semana Santa y el Ramadán en Medio Oriente. Israel acusa a Hamás de haber lanzado al menos 44 proyectiles desde Líbano y Gaza, tras lo cual ordenó un cruento bombardeo contra objetivos de este grupo armado.
El Primer Ministro de Israel Benjamín Netanyahu ordenó movilizar a todos los reservistas de la policía de fronteras tras conocerse la muerte de tres personas en los atentados mencionados, entre ellos un turista italiano.
De esta forma Netanyahu, alertó de una firme reacción ante los lanzamientos de misiles. “Golpearemos a nuestros enemigos y les haremos pagar el precio de cada agresión”, aseguró.
Hamás respondió de inmediato, asegurando que Israel es “responsable de esta agresión y sus consecuencias”, pidiendo a los grupos palestinos unirse contra “la ocupación”.
Este nivel de tensión entre Israel y el mundo árabe no se vivía desde 2006, cuando se mantuvo un mes de guerra con la milicia de Hezbolá en la que murieron más de 1.000 libaneses, en su mayoría civiles, y 165 israelíes.