Los Andes posee el 99% de los glaciares tropicales y advierten que estos no están bien estudiados.
La cordillera de Los Andes, vértebra importante de Sudamérica, se encuentra experimentando importantes transformaciones justamente por el cambio climático, cuyo impacto se está acentuando en el derretimiento y desprendimientos de los conocidos glaciares tropicales.
“Los cambios que estamos viendo no tienen precedentes en la historia humana reciente”, manifestó a La Tercera Pablo Wainstein, ingeniero dedicado al estudio de glaciares andinos y artículos.
Esto, debido a que en la cordillera de Los Andes existen glaciares cubiertos, descubiertos y glaciares de roca, conformados principalmente por polvo y hielo terrestre. Estos hielos conforman el denominado permafrost, que corresponde a unificación entre el material helado con el suelo, tierra y grava por más de dos años.
En esa línea, el experto explicó que si el permafrost no “cementa”, se generarán deslizamientos de tierra, desprendimientos montañosos y apuntó a que los glaciares en Los Andes no están bien estudiados debido a su geografía.
Cabe destacar que Los Andes posee el 99% de los glaciares tropicales del mundo y estos son susceptibles al cambio climático por estar constantemente en el punto de congelación.
De hecho, su impacto afectará directamente al ecosistema, que en invierno suele acumular hielo, nieve y agua, para luego proveerla a los países de la región en la época de verano, así como a las actividades ligadas a la hidroelectricidad, agricultura o minería.
Hoy por hoy, el cambio climático está dejando expuestas las rocas ácidas -que solían estar cubiertas de nieve y hielo-, lo que genera que las aguas de deshielo se integren con metales pesados que, posteriormente, son distribuidas mediante suministros.
Además, las recientes lluvias de carácter intensas que se registraron entre los meses de mayo y junio de 2024 provocó que se erocionara la tierra, lo que prolifera la contaminación del agua.