La Comisión de Gobierno de la Cámara cita a presidentes de colectividades afectadas para discutir “fraccionamiento” este lunes.
El diputado Jaime Mulet (Federación Regionalista Verde Social) criticó la propuesta de senadores para una reforma al sistema político, calificándola de “antidemocrática” por buscar eliminar a los partidos que obtengan resultados bajo el umbral del 5%, señalando además que “quienes sostienen el proyecto, son precisamente los representantes de los partidos que han generado una desilusión muy grande de la gente”.
En ese sentido, defendió la propuesta que presentó hace más de un año con el apoyo del oficialismo y que establece la federación para estas colectividades, cuyos timoneles lo abordarán este próximo lunes en la Comisión de Gobierno Interior de la Cámara, según confirmó el presidente de la instancia, el diputado Rubén Oyarzo (IND).
Al respecto, el parlamentario regionalista explicó que “los proyectos tienen elementos comunes y elementos que son muy diferenciadores”.
En primer lugar, indicó que “lo común, es que ambos proyectos buscan sancionar a aquellos parlamentarios que son elegidos por un partido y que después se van o renuncian. Uno con la sanción máxima que es expulsarlos, en eso hay acuerdo, para que no utilicen una determinada plataforma política y después aparezcan por otro lado. Esto está bien y coinciden ambos proyectos”.
También, en segundo lugar, expusó que “hay coincidencias en que los acuerdos de los comités o bancadas sean obligatorios para los parlamentarios en determinadas materias, no en todas, porque hay situaciones de conciencia donde cada uno puede votar de manera libre. Pero la mayoría de los acuerdos deben respetarse, ese es el sentido que tienen para que cada diputado o senador no haga ni vote como quiera, porque anteponen muchas veces intereses personales por sobre intereses colectivos y hacen muy difícil el desenvolvimiento de ministros y el trámite de la ley, tal como ha ocurrido con muchos partidos y parlamentarios de partidos grandes y pequeños”.
Sin embargo, manifestó que “ambos proyectos tienen una gran diferencia: cómo se achica la cantidad de partidos”.
En ese sentido, declaró que “el proyecto de los senadores, a mi juicio, es muy antidemocrático porque lo que hace es desaparecer a los partidos cuando no logran el 5% aunque hayan sacado primeras mayorías en diputados y senadores. También elimina a estos aunque hayan sacado las más grandes mayorías en sus respectivos distritos, y los reemplaza por candidatos que no han sacado altas votaciones. Y eso obviamente es antidemocrático”.
A manera de ejemplo, expuso que “podría darse el extremo que un candidato saque el 80% de los votos y es elegido, pero su partido no sacó el 5% a nivel nacional, y ese candidato no entra al Parlamento y entra uno que saque el 10% o 1%. Y eso es muy grave. Ese es el principal problema. Ellos quieren ser reemplazados por los de ellos, en el fondo eso es. Esto es como un cerrojo a las ideas y partidos nuevos. Y eso, a nuestro juicio, es muy antidemocrático”.
Contrario a lo anterior, señaló que “el nuestro, en cambio, propone que se puedan federar los partidos, o sea que se unan, de manera que no se eliminen, así mantener las corrientes de opinión. Pueden llegar nuevas corrientes y no se le pone un cerrojo al sistema”.
“Impedir la existencia de nuevos partidos, claro, uno puede decir que es una solución. Podríamos incluso ir al absurdo de que haya un solo partido, como ocurre en China o en Cuba, pero no son regímenes democráticos. Y pueden ser muy eficientes en lo legislativo, pero no son democráticos”, agregó.
Además, como ejemplo, también planteó que “la Concertación que se recuerda como un periodo muy exitoso en lo político, eran 16 partidos. Y se fueron uniendo colaborativamente, federativamente y fusionándose. Fue una experiencia que hoy se mira como exitosa en la historia reciente de nuestro país”.
En resumen, dijo, “nosotros proponemos federar, ellos proponen eliminar. Esa es la diferencia. Y no solo eliminar partidos, sino que también candidatos que hayan sacado altas mayorías y reemplazarlos por quienes tienen menos mayoría, y eso es antidemocrático”.
En ese mismo contexto, precisó que “no es que tengamos temor del 5%, sí podemos competir. De hecho, hoy en el oficialismo no hay ningún partido que tenga menos del 3% y ninguno que tenga más del 6% o 7%. De manera que tampoco es una situación en que los partidos más pequeños se están defendiendo porque tienen temor. No. Lo que defendemos es la democracia”.
“La democracia es lo que hay que defender. El sistema político siempre tiene que estar desafiado, sino los partidos se van anquilosando. Siempre deben tener el riesgo de perder, porque la ciudadanía tiene el derecho a escoger, el derecho a cambiar, eso es esencial en la democracia. Y yo diría que esa es la diferencia más profunda. El nuestro es más democrático, se presentó hace más de un año. Y, obviamente, el proyecto de los senadores busca cerrarle la puerta al aireamiento, a la renovación, y eso es muy grave”, sostuvo el parlamentario regionalista.
Por último, criticó que “quienes sostienen el proyecto político de reforma constitucional en el Senado, son precisamente los representantes de los partidos que han generado una desilusión muy grande de la gente. Partidos que fueron financiados por SQM, por las pesqueras, por Penta, son los que están ahí representados. Partidos que tienen casos de corrupción en distintas comunas de nuestro país, en decenas. Por ejemplo, relaciono a Vitacura con un partido, Maipú con otro, San Bernardo con otro, y se puede seguir así en decenas de casos”.
“Entonces, la verdad es que me parece grave lo que están haciendo. Busquemos un acuerdo más razonable donde se permita que la política y que los partidos nuevos puedan entrar y competir, pero que actúen federalmente como uno solo para que no haya tantas personas en decisiones de esta naturaleza”, concluyó.
Por su parte, el diputado y presidente de la Comisión de Gobierno Interior, Rubén Oyarzo (IND), coincidió con esta perspectiva y confirmó los próximos pasos en la tramitación del proyecto presentado por su par.
En primera instancia, el parlamentario declaró que “estoy absolutamente en contra de la propuesta que ha emanado, entre cuatro paredes, un grupo de cuatro senadores y un diputado, y que pretende eliminar la diversidad necesaria en la política chilena”.
A lo anterior, añadió que “esta propuesta no tiene viabilidad política e incluso cada día va perdiendo más respaldo entre los mismos que aparecieron apoyándola en primera instancia”.
Además, informó que “el próximo lunes están invitados a la Comisión de Gobierno Interior, la que presido, los presidentes de los partidos políticos que podrían verse afectados por la propuesta de este grupo de senadora y un diputado”.
“Y en esta instancia continuaremos la tramitación de la propuesta del diputado Jaime Mulet en torno a reformar el sistema político, y que ya está en trámite en la Comisión de Gobierno Interior que presido”, finalizó.