General Cerri en Bahía Blanca se convirtió en el epicentro de la catástrofe que deja hasta hoy 16 muertos.
Fueron casi 400 mm de agua caída, prácticamente lo que llueve en un año lo ocurrido el pasado viernes en la ciudad de Bahía Blanca, ubicada en la Provincia de Buenos Aires. Muchos han señalado que la zona es un caos después de una guerra. ya que las fuertes precipitaciones han dejado un saldo de 16 muertos, 140 desaparecidos y 1.500 evacuados. Una ciudad que hoy lunes amanece con cielos parciales y con el agua en retirada pero que deja huellas imborrables para sus habitantes.
Mientras las autoridades locales continúan llevando ayuda a los damnificados con maquinaria pesada y haciendo un catastro de las pérdidas, el Ministerio de Desarrollo de la Comunidad de la Provincia envió a 69 personas y en varios lugares se instalan cocinas y consultorio móvil para entregar atención primaria de salud.
Las historias de familias que perdieron seres queridos y prácticamente todos sus enseres han marcado la pauta en el país trasandino. Uno de los casos más dramáticos fue lo ocurrido con Rubén Salazar, un hombre de 43 años, casado dos hijas, que llegó a socorrer a una madre y sus dos hijas de 1 y 5 años que se encontraban en una camioneta. Finalmente la fuerza de las aguas los arrastró a todos y resultaron fallecidos. Una triste historia que demuestra lo que los habitantes de Bahía Blanca experimentan en su diario vivir. Una pesadilla.
Las críticas se han dejado caer con todo sobre el gobierno de Javier Milei, ya que argumentando que hay “cortar la grasa del Estado”, su gobierno despidió a 100 trabajadores del Servicio Meteorológico Nacional, lo que según expertos hizo que no se dieran las condiciones para alertar sobre la tragedia. Desde Presidencia de la Nación anunciaron que se decretan tres días de duelo nacional “por el fallecimiento de compatriotas en el temporal del viernes pasado”.